“Nada es miserable a menos que pienses que lo es; y, por el contrario, nada trae felicidad a menos que estés dispuesto a recibirla”

Boecio

Anicio Manilio Torcuato Severino Boecio, fue un filósofo y poeta latino romano nacido en el año 480.

Conocido también como San Severino Boecio, compaginó su faceta como estadista, con la de traductor de filosofía griega y como autor sobre distintas disciplinas como la música, la aritmética y la astronomía.

Primeros años

Boecio provenía por parte de su madre, de una de las familias mas destacadas de la nobleza de la época. 

Empezó estudios de retórica y filosofía gracias al apoyo que le brindó el célebre senador y patricio romano Quinto Aurelio Memio Simaco, continuó sus estudios en Atenas y terminó su formación en Alejandría, en donde consolidó su formación helenística muy influenciada por el Neoplatonismo.

Historia

En el año 510, fue cónsul ordinario y en el año 523 fue nombrado primer ministro del rey Ostrogodo Teodorico el Grande.

Debido a la acumulación de tanto poder, fue acusado por sus adversarios de conspirar a favor del imperio bizantino por el referendario Cipriano, quien era miembro de ese partido, por lo que fue torturado y decapitado al norte de Pavia.

Boecio es reconocido como un mártir de la fe católica por la martirologia romana, y el papa León XIII aprobó su culto para la diócesis de Pavia en donde se confirmó su estatus de Santo en diciembre de 1833.

En su obra se propuso traducir al latín las obras de Aristóteles y de Platón, y aunque no concluyó dicha obra en su totalidad, se afirma que Boecio fue para la escolástica medieval por sus traducciones comentarios y escritos, la principal autoridad en lógica en la Edad Media.

Fuente: Wikipedia