Al-Farabi

Fue un filósofo medieval y polímata nacido en Wasil, distrito de Fara en el Turquestán Occidental, actualmente conocida como Turkmenistán en el año 872. 

Al-Farabi fue llamado Segundo Maestro por Averroes y Maimónides. Además de ser un lógico de primer orden fue él uno de los primeros que estudió, comentó y difundió entre los árabes la filosofía de Aristóteles.

Reconstruir los datos biográficos de Al-Farabi no es una labor sencilla pues muy poca información existe al respecto. De lo poco que se sabe es que fue alumno del lógico Yuhanna Ibn Haylan y del gramático traductor Abu Bishr Matta. 

Primeros años.

Se sabe que fue hijo de una noble familia y su padre un militar de la corte turca. Que estudió en Bagdad gramática, filosofía, matemáticas, música y ciencias.

Obra.

Al-Farabi trabajó en los textos de Platón y Aristóteles viviendo en un contexto cargado de perturbaciones a consecuencia de las relaciones existentes entre el Islam y los sucesores políticos del Profeta. 

Escribió una obra concerniente a “El acuerdo” de los filósofos Platón y Aristóteles, una enumeración de los Diálogos de Platón, una obra dedicada a las Opiniones de los habitantes de la Ciudad Virtuosa y un sumario de las leyes de Platón.

En lo que respecta a los trabajos sobre Física y Cosmología, Al-Farabi escribió un comentario sobre la física, otro sobre el cielo y el mundo, y meteorológicos, sobre el movimiento perpetuo y sobre el alma.

También dedicó varios escritos a la ética y la política, por lo que algunos han considerado a Al-Farabi como el iniciador de la filosofía política Islámica.

En una de sus obras capitales, el Catálogo de las ciencias, Al-Farabi enumera las ciencias y se dedica a estudiar el objeto de cada una de las partes que la componen.

El catálogo de las ciencias lo divide en cinco partes, la ciencia del lenguaje, la ciencia de la lógica, la ciencia de las matemáticas, la ciencia de la física y la Ciencia de la política el derecho y la teología.

Últimos años.

Su elocuencia y talento para la música y la poesía se ganaron el aprecio del sultán de Siria, Sayf al-Dawla, quien quiso incorporarlo a su corte.

Según una versión, Al-Farabi se negó a la petición y excusándose se marchó de palacio, siendo asesinado por dos ladrones cuando volvía de camino.

Según otra versión, pasó gran parte de su vida en la corte de Siria, mantenido por el príncipe y muriendo en Damasco en el año 950.

Fuentes: Wikipedia, philosophica.info