Empédocles
Empédocles de Agrigento fue un filósofo, poeta, médico y político griego nacido hacia el año 490 a. C. en Agrigento, una ciudad próspera de la Magna Grecia (actual Sicilia).
Primeros años
Pertenecía a una familia aristocrática, posiblemente vinculada a la oligarquía local.
Desde joven mostró una personalidad carismática y una inteligencia brillante, lo que lo llevó a destacarse tanto en la vida pública como en el pensamiento filosófico.
Recibió una educación diversa, influida por las corrientes pitagóricas, eleáticas y posiblemente también por pensadores orientales, lo cual marcó profundamente su visión del mundo.
Su obra y pensamiento
Empédocles es célebre por haber propuesto una cosmología basada en cuatro elementos fundamentales: tierra, agua, aire y fuego, que consideraba las raíces (rhizómata) de toda la realidad. Esta teoría fue una de las primeras intentonas de explicar la diversidad del mundo natural sin recurrir a un solo principio.
Introdujo además dos fuerzas cósmicas opuestas: el Amor (Philía), que une, y el Odio (Neikos), que separa. Según él, el universo estaba en constante cambio por la acción cíclica de estas fuerzas sobre los cuatro elementos.
Su obra principal es “Sobre la naturaleza” (Perì Phýseos), un poema en verso del cual solo se conservan fragmentos. En ella, Empédocles combina ideas filosóficas, cosmológicas y religiosas. También se le atribuye otro poema, “Las purificaciones”, de tono más místico y ético, donde expresa ideas sobre la reencarnación y la purificación del alma, influido por el orfismo y el pitagorismo.
Empédocles también fue un destacado médico y sanador, y se dice que practicaba la medicina con éxito, siendo incluso considerado un taumaturgo por algunos de sus contemporáneos. En la vida pública, tomó partido por el pueblo y se opuso a los abusos de poder, lo que le ganó fama de defensor de la justicia.
Legado
Empédocles dejó una profunda huella en la historia de la filosofía. Su teoría de los cuatro elementos fue adoptada y desarrollada por filósofos posteriores, incluidos Aristóteles y los alquimistas medievales.
Su pensamiento anticipa nociones modernas de la física y la biología, y su vida sigue siendo objeto de fascinación por su mezcla única de racionalismo científico y misticismo religioso.
Últimos días y muerte
Los relatos sobre los últimos días de Empédocles están rodeados de leyenda.
Según la tradición más conocida, buscaba alcanzar una forma de divinidad a través de la sabiduría y la purificación.
La versión más famosa sobre su muerte fue transmitida por Diógenes Laercio y otros autores posteriores: se dice que Empédocles se arrojó al cráter del volcán Etna para desaparecer sin dejar rastro y que su desaparición fuera interpretada como una ascensión divina. Sin embargo, según la leyenda, el volcán devolvió una de sus sandalias de bronce, revelando así el engaño.
Aunque esta historia es seguramente apócrifa, refleja la imagen que sus contemporáneos y generaciones posteriores tenían de él: la de un sabio excéntrico, casi un místico, que cruzaba los límites entre la filosofía, la religión y la ciencia. Murió hacia el año 430 a. C.
Fuente: Chatgpt