Antonio Machado
Antonio Machado Ruiz (1875–1939) fue uno de los poetas más representativos de la Generación del 98 y una de las figuras más destacadas de la literatura española del siglo XX.
Primeros años
Nació el 26 de julio de 1875 en Sevilla, en el seno de una familia liberal y culta.
Su padre, Antonio Machado Álvarez, era folclorista y estudioso de las tradiciones populares, mientras que su abuelo, Antonio Machado Núñez, fue un destacado naturalista y científico.
En 1883 la familia se trasladó a Madrid, donde Antonio y su hermano Manuel ingresaron en la Institución Libre de Enseñanza, ambiente que marcaría su pensamiento liberal y su inclinación por la reflexión filosófica y literaria.
Durante su juventud, Machado vivió entre Madrid y París, ciudad a la que viajó en varias ocasiones y donde conoció a figuras como Rubén Darío y Oscar Wilde, que influirían en su formación literaria.
En 1903 publicó su primer libro, Soledades, que más tarde revisaría como Soledades, galerías y otros poemas (1907). Su poesía en esta etapa muestra la influencia del modernismo, pero con una marcada introspección y simbolismo.
Matrimonio
En 1907 obtuvo una cátedra de francés en Soria, donde conoció a Leonor Izquierdo, con quien contrajo matrimonio en 1909.
La temprana muerte de Leonor en 1912 afectó profundamente a Machado y dio lugar a algunos de sus versos más emotivos, recogidos en Campos de Castilla (1912), obra que refleja la preocupación por la realidad española, el paisaje de Castilla y la crítica social.
Posteriormente, trabajó como profesor en Baeza, Segovia y Madrid, y se vinculó con la vida intelectual y política de España.
Obra.
Su poesía evolucionó hacia un lenguaje más sobrio y comprometido, como puede apreciarse en Nuevas canciones (1924).
Durante la Guerra Civil Española (1936–1939), Machado se alineó con la causa republicana, escribiendo poemas de compromiso y esperanza.
Últimos años y muerte.
En los últimos años de su vida, se vio obligado a exiliarse por el avance franquista.
Cruzó la frontera hacia Francia en enero de 1939, estableciéndose en Collioure, donde murió el 22 de febrero de ese mismo año, apenas un mes después de su llegada.
En su bolsillo se encontró un papel con los versos: “Estos días azules y este sol de la infancia”, que se consideran sus últimas palabras poéticas.
Fuente: Chatgpt